Quizás los mayores recuerden un antiguo juego desarrollado por Monolith Productions, que data de finales de los 90 y se llama Captain Claw. El jugador utilizó un gato pirata, Claw, en un ambiente hostil lleno de perros antropomórficos en busca del Amuleto de las Nueve Vidas. Un juego de plataformas en 2D a la antigua usanza cuyo punto fuerte era sin duda el carisma del protagonista. Maldición de las ratas del mar No es el Capitán Claw, pero varias veces durante las horas pasadas entre las costas o las verdes colinas de este metroidvania, esperábamos que de un momento a otro nuestro querido Claw viniera a revivir la suerte de esta tripulación de ratones antropomórficos, mucho más. más fascinante que divertido jugarlos. Te contamos por qué en el nuestro Revisión de la maldición de las ratas marinas.
Hermosa y brillante
Maldición de las ratas del mar es un proyecto que al momento de la campaña Kickstarter había sorprendido con su estilo tan peculiar, especialmente por la dirección artística, el cuidado de los fondos y la caracterización de sus extraños animales antropomorfos. Pero lamentablemente para los piratas protagonistas de la aventura, no todo lo que reluce es oro, y sólo se han mantenido algunas de estas premisas.
Curse of the Sea Rats pone a los usuarios en la piel de uno de los cuatro prisioneros de un barco inglés que regresa de las colonias americanas. Sin embargo, durante el viaje, debido a la bruja pirata Flora Burns, el barco naufraga en la costa de Irlanda y vosotros, ahora prisioneros libres, os encontráis transformados en ratones antropomórficos. Sin demasiados spoilers, tendrás que salvar al hijo del almirante, descubrir el secreto del Amuleto del Ojo de Serpiente, cazar a Flora Burns e intentar recuperar tu forma original. Sobre el papel, las premisas están todas ahí, y el juego consigue dar una excelente primera impresión, entre costas escarpadas, colinas verdes, cuevas oscuras y una caracterización refinada de personajes y enemigos. Incluso los jefes, con sus típicas entradas, nunca carecen de carácter. Basta pensar en la familia Panzo, formada por un hijo, una hija y una madre que están visceralmente ligados a la comida y se muestran en todos los sentidos tan grotescos que resultan entrañables (si no fuera por el explícito estereotipo español). No esperes mucho de la escritura: la narrativa es muy plana y monótona, sin sorpresas hasta las líneas finales del juego. Durante gran parte de la aventura buscarás a Flora y al joven a quien salvar y te inundará un humor poco atractivo, también gracias a los tropiezos de localización.
Por tanto, un mundo hermoso para explorar, pero esencialmente no muy complejo. La estructura metroidvania en la base de este juego de plataformas es evidente, pero el diseño del mapa nunca es ingenioso y la exploración de los escenarios nunca te obliga a utilizar materia gris. La falta de variedad en las misiones secundarias que recibimos de los distintos personajes no ayuda, y salvo una afortunada excepción, todo se desarrolla de una manera demasiado lineal y predecible. Por supuesto, así es más difícil perderse y no saber a dónde ir, pero la experiencia es decididamente plana.
Un hombre guapo que no baila.
La agradable presentación del juego da paso rápidamente a una experiencia anodina llena de cuestiones que en gran medida están relacionadas con el sistema de combate. La configuración de la batalla es clásica y se basa en tres ataques, un botón de defensa/esquiva, saltos y la posibilidad de utilizar consumibles. Además, existe un sistema de habilidades y mejoras que desarrolla la jugabilidad de forma diferente para cada uno de los héroes. El resultado es una sopa que intenta mezclar elementos tomados de Dark Souls y Hollow Knight con cierta vaga inspiración de Castlevania. Sin embargo, donde La maldición de las ratas marinas sale mal no es en la teoría ni en las intenciones, sino en la práctica.
De hecho, la jugabilidad decae desastrosamente en la sensación de los combates y en el equilibrio de la dificultad. El primero es bastante variado (entre héroes especializados en corto y largo alcance) pero resulta completamente monótono e insatisfactorio en la retroalimentación de los golpes asestados. El segundo... es un gran problema. Lamentablemente el título tiene una curva de dificultad muy pronunciada en las fases iniciales, siendo el primer jefe tan difícil que te obliga a volver atrás y entrenar mucho. Sin embargo, una vez superes a la familia de ratones españoles, el juego se derrumbará sobre sí mismo, perdiendo toda esa sensación de desafío. A partir de ese momento la aventura se vuelve tan simple que resulta banal.
La decisión del desarrollador de darle a Buffalo Calf, uno de los cuatro héroes, balas infinitas para sus armas a distancia no ayuda. Así que basta con utilizar ese personaje para destruir a cualquier enemigo a distancia, pensando sólo en esquivar durante las fases contra los jefes. Si eso no es suficiente para ti y estás en problemas, siempre podrás utilizar su energía eléctrica capaz de aturdir a tus oponentes el tiempo suficiente para desintegrarlos. El sistema de progresión del personaje agrega variedad entre los distintos héroes, pero Buffalo Calf es mucho más fuerte que los demás que te hace preguntarte por qué usar a alguien más cuando juegas solo.
Conclusiones
Versión probada PC con Windows Entrega digital Vapor, tienda de playstation, Tienda Xbox, Nintendo eShop Precio 17.99 € Holygamerz.com 6.0 Lectores (6) 8.2 Tu votoLos piratas de Curse of the Sea Rats navegan en un espléndido barco que, sin embargo, se hunde debido a mil goteras. El título es agradable a la vista pero la experiencia es plana, desequilibrada y poco estimulante para jugar. Una pena, dada la variedad de habilidades, las posibilidades de personalización y toda la serie de excelentes opciones incluidas entre poderes, habilidades y mejoras. Esperábamos que los ratones antropomórficos de Petoons Studio nos hicieran volver a enamorarnos de otros piratas no humanos y en cambio una vez más, como en el más clásico de los clichés, el primer amor nunca se olvida, querido Capitán Garra.
PRO
- Estéticamente agradable
- Inspiración artística
CONTRA LA
- Desequilibrado
- Narrativamente plano
- Algunos destellos notables